En esta edición de 2018 en la Amstel Gold Race, Michael Valgren (Astana) dio la sorpresa en la primera gran carrera de las Árdenas. Fue el más listo encontrando el mejor momento para salir del grupo de ocho corredores cuando la tranquilidad y el control se asomaba entre ellos. El único que le siguió fue Roman Kreuziger (Michelton Scott) al que batió en el sprint final. Por detrás Gasparotto (Bahrein-Merida les quiso dar caza pero no pudo llegar.
Valverde, Sagan, Alaphilippe o Tim Wellens no salieron a coger la rueda de ninguno de estos ciclistas y la carrera finalizó ahí después de que Alejandro fuera el hombre que rompió la carrera en el grupo de los favoritos después de que ciclistas como Landa le ayudaran mucho. Le siguieron Sagan y Alaphilippe entre otros para llegar a la cabeza de carrera donde Kreuziger y Gasparotto ya la habían cazado kilómetros antes juntándose así con los pocos competidores que quedaban de la escapada.
Astana tenía dos bazas en la cámara y el primero en intentarlo fue Jakob Fulgsang. Logró unos metros de ventaja pero el murciano no tardó mucho en cazarle. Ocho ciclistas se iban a jugar la carrera. Parecía un sprint ya que los gallos del corral se estaban vigilando mucho. Entonces, Valgren que fue el más listo de la clase atacó para dejarles atrás. Es la séptima victoria para el danés y se podrá desquitar del segundo puesto logrado en 2016.
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